ASOCIACIÓN CULTURAL "ESTUDIO Y DIVULGACIÓN DEL PATRIMONIO LINGÜÍSTICO EXTREMEÑO" (APLEx)

APARTADO DE CORREOS 930 - 10080 CÁCERES (ESPAÑA)

Número de Registro 3179.  CIF nº  G10309607

INÉDITOS

 

JOSÉ GARCÍA SUÁREZ SAAVEDRA

 

Duende Extremeño Andaluz del Habla en Fuente de Maestre. Peculiaridades y tradiciones

J.G. Suárez Saavedra.

Registro de la propiedad intelectual en Barcelona Nº 985 y de solicitud B- 1208- 06.

 

Datos biográficos del autor:

José García Suárez, seudónimo José G. Suárez Saavedra, en reconocimiento al segundo apellido de su abuela materna, nació en Fuente del Maestre en 1945. En su haber, como la mayoría de la población de pos guerra, sin contar con los que quedaron en el analfabetismo, sólo cuenta con la escuela pública primaria hasta los siete años con doña Rufina, la única enseñante que le proporcionó una ventana, en aquellos años, a medio abrir. Pasó luego al colegio de la salida a Almendralejo donde, cuando no era requerido para tareas en el campo, se pasaba las horas muertas viendo fumar y leer la prensa a todas horas a don Francisco, el autor no recuerda sus apellidos, sin que a sus escasos alumnos les prestase atención si no era para dar algún remoquete porque le molestasen en su ardua tarea de leer la prensa del movimiento.

A los ocho años se trasladó su familia a las cercanías de Montijo, a lo que aún hoy sigue llamándose Guadiana del Caudillo. Algunas clases nocturnas, entre parafernalia falangista y malos tratos, recibió en dicho lugar, en el que hubo de dedicarse a tareas productivas desde su más tierna infancia.

A sus dieciséis años su familia, fundamentalmente, por la carencia de vivienda, decide trasladarse a Barcelona. Y allí se presentaron con lo puesto ofreciendo sus brazos y la formalidad heredada de una región noble y de una familia republicana, por parte de padre, masacrada por el sin sentido de unas miras cavernarias.

Su existencia ha estado marcada por la dedicación a multitud de oficios y tareas desde fabricar baldosas y caramelos; ha sido tornero, dependiente en una tienda de mantas y tejidos, cocinero en La Costa Brava, conductor de vehículos y por último pescadero. Todo este deambular durante su vida y su afición a la lectura, a pesar de su único título de certificado de estudios primarios, le ha proporcionado el material necesario para tratar de abrirse camino en la literatura con varios títulos, la mayoría inspirados en Extremadura, listos para la imprenta. Éste que el lector tiene en sus manos es su primer trabajo aceptado por una imprenta con la esperanza puesta en que le abra las puertas al resto de su obra.

No se puede pasar por alto su militancia activa contra el franquismo y por la Paz y el Desarme. En esta última faceta, en Cataluña, participó en la creación de la plataforma unitaria por el referéndum contra la OTAN y por la neutralidad de España.

Prólogo

Los lectores del libro que lleva por título el que precede tienen entre sus manos la obra de un autor extremeño, fontanés por más señas, que ha pasado casi toda su vida fuera de la tierra, de la patria chica a la que ahora quiere homenajear con el estudio que hace sobre el habla de Fuente del Maestre.

La ausencia física y los kilómetros que separan al estudioso de la localidad extremeña, algo que bien pudiera parecer un inconveniente, se transmuta en distanciamiento objetivador a la hora de abordar la materia tratada, aunando con ello el impulso de su corazón —el de dejar testimonio fehaciente de un estado de la lengua que él considera en peligro— y el recuerdo fiel que en su mente guarda de vocablos y expresiones que hoy, bajo el poderoso impulso regularizador a la par que empobrecedor de los más media, han ido quedando oscurecidos, cuando no desechados y definitivamente perdidos, sobre todo para los hablantes fontaneses más jóvenes, porque según palabras del propio autor "Hoy La Fuente, sin haber abandonado en lo fundamental su deje, ha cambiado tanto que no se conoce ni a sí misma. Y puede decirse esto porque […] los que siempre han vivido en ella o emigraron a temporadas, igual no se percatan que están en otra Fuente". Es ahí donde radica la necesidad sentida por José G. Suárez Saavedra de dejar plasmada en páginas escritas y publicadas el estado de un habla en transformación.

Su autor no es un dialectólogo de profesión, pues su trayectoria vital ha discurrido por otros derroteros, pero ha dedicado gran parte de su tiempo de ocio a estudiar concienzudamente la materia tratada, implicándose en ella como si la vida le fuese, intentando encontrar en obras similares en ámbito de investigación la metodología idónea que no ha podido aprender en las aulas; ha visitado bibliotecas, consultado aquellas fuentes bibliográficas que podían aportarle sistematización a sus observaciones. Algo que el lector puede constatar en el capítulo que dedica a recoger la información pertinente, para poder aplicar los instrumentos a labor tan meritoria.

Cuenta entre sus objetivos como primero y principal el radical rechazo a lo que llama "complejo de mal hablantes" especialmente referido a la realización fonética inevitablemente comparada con un hipotético andaluz no existente más que en la mente de aquellos fontaneses acomplejados —pues la realidad del habla andaluza es mucho más complicada de lo que a simple vista se piensa—, y en segundo lugar se revuelve contra el hecho de que gran parte del acervo léxico fontanés y extremeño figure en los diccionarios como propio de otros pagos, especialmente andaluces e hispanoamericanos, circunstancia esta última que habría que matizar e interpretarla como participación mutua en una realidad lingüística afortunadamente enriquecedora, si bien no esté demás reclamar la antigüedad más que la paternidad de usos comunes. No se muestra indiferente tampoco a la hora de protestar por lo que los lingüistas denominan arcaísmos, vulgarismos etc. El autor así opina al respecto, pero parodiando al gran filósofo francés hemos de aceptar que "la ciencia tiene razones que el corazón no comprende" y que son muchos los investigadores que han ido delimitando una forma de nombrar a la que no podemos hurtarnos, lo que no significa que no puedan ser rebatidas, cosa que nuestro autor hace ampliamente.

El libro aparece organizado en una introducción con las consideraciones pertinentes algunas de las cuales acabamos de citar. Siguen en bloque Alfabético de términos con grafía diferenciada para la versión de la forma "popular" y la "forma estándar" a las que en ocasiones añade la indicación de ser compartida con otras hablas dialectales. Un segundo bloque se presenta a la inversa: primero "forma estándar" y a continuación la "forma popular": no se trata de un procedimiento reiterativo sino del deseo de facilitar la consulta a lectores con distintos intereses.

Como peculiaridad excepcional en este tipo de trabajos, el autor se ha permitido intercalar breves anécdotas, y relatos ficticios con los que ejemplificar los fenómenos aludidos en un deseo de edulcorar una lectura raramente emprendida como simple entretenimiento diversivo.

Y para completar la información previa, dedica también unas palabras a explicar las formas gráficas utilizadas, haciendo para ello breves excursos sobre cuestiones de Fonética y Fonología históricas, basándose para ello en la Bibliografía pertinente citada en el apartado correspondiente.

El trabajo que se ofrece en estas páginas se acoge mayoritariamente a un tratamiento descriptivo y muy simplificado a fin de evitar explicaciones de evolución vocálica o consonántica más propias de la Fonética y Morfosintaxis Histórica que, aunque pertinentes, no serían fácilmente asequibles a lectores no iniciados en cuestiones ligüísticas.

Los fontaneses de hoy son, por así decirlo, los causantes de que este libro vea la luz: a ellos y a los que vendrán después, van dirigidas estas páginas con el noble propósito de ilustrar una parte de nuestra historia para así poderla proyectar hacia el futuro que deseamos próspero. El habla fontanesa nos acompaña en el uso diario en lugares distantes y en circunstancias variadas, en ella participamos con idéntica dedicación que nuestros paisanos residentes que viven el día a día de sus calles y paisaje. Sirvan, pues, estas páginas de memoria viva vivificadora del habla fontanesa.

Firmado.: M. José Porro Herrera, (natural de Fuente del Maestre) directora del Departamento de Literatura Española. G.I "Sociología de la Literatura Andaluza de los siglos XIX y XX y sus relaciones con Hispanoamérica" (SOLARJA) en La Universidad de Córdoba.

Introducción

¿Dónde está el duende fontanés?

Contestar a esta pregunta es harto difícil. No obstante a mí se me ocurre una contestación muy simple: el duende fontanés es, o fue, la vida que desinteresadamente vertieron la mayoría de sus habitantes desde tiempos pretéritos hasta nuestros días. Si La Fuente, creo yo con humildad, formase parte de Andalucía, habría superado a Lepe. Pero al no ser así; al estar su toponímico enmarcado en el centró de La Baja Extremadura, Fuente del Maestre, excepto para los que en su comarca nos entienden y simpatizan con nuestro carácter, es una desconocida.

Me decía en Barcelona, no recuerdo su nombre, un meridano, que los fontaneses engañan a los gitanos. Se me hace difícil asumir pareja aseveración, pues, en mi rodar por la vida, he visto en los calés aptitudes ingeniosas y desparpajos difícilmente superables. Pero, sí, podemos asegurar que a los fontaneses, en general, salvo las consabidas excepciones, es muy difícil que los engañe nadie.

Llegar a La Fuente desde Almendralejo, tanto si se es emigrante como forastero, es una gozada. El pueblo, a medida que te acercas, con su iglesia panzona, va asomando o mejor insinuándose tras las suaves vaguadas entre Almendralejo y La Fuente. Y parece que te llame, desde sus lejanos orígenes romanos, a su seno entre cariñoso y entrañable. Entre un raro sentido señorial periclitado y un distanciamiento a la media capa, también en declive, parece mostrar cultas épocas y el encanto del mundo antiguo. Porque La Fuente fue siempre antigua, popular y dicharachera. La Fuente eran, en el pasado, las casas, con sus doblaos, sus borricos y sus gallinas; las casas empezaban en sus punteras y avanzaban hacia el centro, entre un terrizal en verano y un embarraéro en invierno, como queriendo detener su avance hacia el centro por hallarse más identificadas con el lejhío. Aquellas casas parecían, entre callejas y esquinas, querer obviar las calles empedradas o adoquinadas.

Y allí, en la calle Las Eras, en La calle Alcudia, en el Alambique, en Las Casas Nuevas, la Barseloneta o en los alrededores de La Calle Feria, había una Fuente muy distinta a la de La Calle Nueva y los alrededores de La Corredera. Y esa es La Fuente por mí más recordada: la de los niños empelotaos, hasta en invierno; la que sufría la incuria bajo unos tiempos infaustos entre la resignación y el reírse hasta de su sombra o de su adverso destino. Pues La Fuente supo siempre reír y jalear. No había a malas penas ni para comer pero, en la taberna, con cuatro copinas peleonas comentábanse los asuntos diarios, se le ofrecía al recién llegado su copa y se hacía el chiste de rigor con el primerito que se terciaba.

Hoy La Fuente, sin haber abandonado en lo fundamental su deje, ha cambiado tanto que no se conoce ni a sí misma. Y puede decirse esto con toda certeza porque tengo la ligera idea de que los que siempre han vivido en ella o emigraron a temporadas, igual no se percatan que están en otra Fuente, en otro respirar, en otro palpar la vida más racional, más acogedor. Y eso nadie se lo ha regalado al fontanés sea pequeño, mediano propietario o jornalero. El fontanés lo ha sudado por todos los caminos oportunos o conducentes a donde podía ganare una perra, a donde su concurso era necesario para transformar la vida cambiando la suya propia.

Y en este cambio también el habla y el entenderse los humanos han cambiado en La Fuente. Sería ridículo no reconocerlo y al mismo tiempo también lo sería no reconocerle a nuestra habla el reflejo del espíritu humano condicionado por su hacer diario campesino. Con esto no quiero propiciar un asirnos al habla del pasado como unos nostálgicos empedernidos y amargados. No, el habla, o la manera de entenderse la gente, es una herramienta que elevó al homo sapiens a su condición superior. Pero ésta también evoluciona adaptándola el humano a sus nuevas necesidades.

Así, ¿para qué este humilde trabajo titulado "Duende Extremeño Andaluz del Habla en Fuente del Maestre"? Primero y principal para sacudirnos, de una vez por todas, el complejo de mal hablantes. Y aquellos con la suficiente curiosidad o paciencia para leer todo el libro, percibirán cómo la última edición de la Real Academia de la Lengua, sin apenas citar a Extremadura, recoge bastante de nuestro patrimonio popular. Por fin, aunque con la coletilla de vulgarismos o familiarismos, o incluso como la última acepción, se ha impuesto el desempolvar antiguas recopilaciones no admitidas; se ha impuesto el recoger más allá del charco lo que los extremeños llevaron en su día hasta las Américas; pero necesitamos que nos aclaren su origen, se hace necesario aclarar dónde, de siempre, y actualmente, se sigue usando lo que a veces, equivocadamente, se pasa por supuestos americanismos cuando aquí, y no allí, tuvieron su origen.

Y no es correcto sentirse plenamente satisfecho con lo que la Academia de la Lengua ha desempolvado. Y no, porque lo admitido, no siendo suficiente, parece que lo hayan hecho, tras hacérnoslo ignorar y ocultar al gran público, furtivamente y a espaldas del territorio más proscrito en su peculiaridad.

Un raro complejo, cada vez más influenciados por los medios audiovisuales, parece que nos lleve a huir de nuestras milenarias raíces para caer en una estandarización insípida y sin tonalidades lingüísticas.

Y los fontaneses no hablamos mal; los fontaneses hemos hablado, con la semántica y la fonética vertida por el mundo antiguo en nuestro lugar, de acuerdo con lo necesitado por nuestro entorno campesino y jornalero. Los fontaneses arrastramos la tradición del mundo antiguo, especialmente latino, al igual que muchos lugares, con origen romano, de la Rioja, Silos, etc, para abajo; sin olvidar el posible influjo de lo andaluz en nuestro pueblo que viene de lejos. Y con altibajos y pequeñas variaciones es una gozada comprobar, en diccionarios bien trabajados como el "Vocabulario Popular Andaluz" del pedagogo Francisco Álvarez Curiel y "Peculiaridades del Habla de Begíjar" del profesor Francisco Martínez Calle, cómo nuestras singularidades coinciden tanto con los giros andaluces como con los de Extremadura del "Diccionario Extremeño" del profesor Antonio Viudas Camarasa. Que nadie entienda esto como una sobre valoración de lo andaluz en Fuente, pero, quitada nuestra pronunciación de la ll, de origen leones, ahí están el seseo y la desaparición de la d, la r y la l final en nuestra habla junto a la aspiración de la s intercalada. Es decir lo leonés nos marcó pero lo andaluz parece que dejó su influjo en el pueblo o lo introdujo posteriormente. Según el profesor Antonio Viudas Camarasa, el seseo de Fuente del Maestre está más relacionado con el portugués que con lo andaluz. No se lo voy a negar, es más, aunque yo no me había apercibido plenamente, más adelante ya señalo que la s fontanesa es palatal, más pronunciada o más basta como decimos nosotros que la andaluza. Por tanto nada que objetar: los vocablos y frases hechas de Andalucía nos impregnan, pero es incuestionable que nuestra s, sin que seamos vecinos, puede tener más que ver con la de Olivenza y con la de Talavera la Real, que con la andaluza. Y si hacemos caso a un trabajo del doctor José Antonio Gonzáles Salgado, presentado al Congreso Internacional de APLEx 2004, nuestra s, además de en lo anterior, podría tener origen en una repoblación morisca, como una evolución propia al igual que en la Andalucía seseante, en el habla gitana y hasta de posible influencia sefardí o judía dada la comunidad judía tan importante que llegó a existir en Fuente. En cambio la fontanesa profesora María José Porro Herrera, mantiene que puede ser simplemente fruto del aislamiento fontanés; cosa por otro lado bastante posible porque, según algunos vecinos de Frejenal de la Sierra, hasta en su pueblo se seseaba hasta no hace tanto. Es decir: es muy posible que en la antigüedad, en gran parte de Extremadura, y más en la provincia de Badajoz, se seseara.

Yo no pretendo hacer ninguna tesis sobre el particular; que la Divina Majestad Lingüística me ahorre semejante pretensión. Pero, todo y que la profesora María José Porro Herrera sostiene que ambas hablas, la de Begíjar y Fuente, son casi simultaneas en el tiempo, para mí resulta muy curioso que la de Begíjar, un pueblo del centró de Jaén, donde el romano, como en La Fuente, plantó el olivo y la viña (quitado el seseo que allí no se da pero sí en su entorno), reúna muchísimas más peculiaridades con nosotros que toda nuestra comarca junta y sin apenas arabismos. Y algo parecido ocurre con el VPA del profesor Francisco Álvarez Curiel. Éste, habiendo recogido su material de Málaga y sus alrededores, es decir en la Andalucía occidental, nos muestra cómo coinciden muchos de sus vocablos y frases hechas con los de Begíjar y con los de Fuente.

No quiero alargarme más sobre el particular; solamente señalar que a mí, más interesado en la literatura que en la pureza del habla estándar, no me ha gustado nunca considerar arcaísmos ni vulgarismos términos que, por falta de uso generalizado o aislamiento territorial, mochos de ellos no son de uso general, porque en el pasado el academicismo imperante no los tuvo en cuenta. Pues la literatura, la ficción al menos, necesita del habla popular como las plantas la vivificante humedad. Y es francamente extraño cómo, en unos tiempos de mezcolanzas y trasiegos entre todos los rincones y etnias, la mayoría de las editoriales españolas siguen manteniendo modelos de edición cada vez más y más uniformes y estandarizados. Y si alguna innovación se admite está condenada a ser exótica e importada. Y a la vieja Península parece que sólo le quede la estandarización y para los demás el barroquismo envuelto en exótico celofán.

Pero eso ya es otra historia. Yo creo que lo que nos interesa, o lo que mi humilde aportación pretende ofrecer al conocimiento de nuestra habla, es dotar a las nuevas generaciones del saber cómo hablaban sus ancestros y cómo ellas aún lo siguen manteniendo ampliamente. Y así, el que se sienta más a gusto hablando fontanés, los que no lo hayan perdido, que lo hablen sin complejo ni remilgos. Pues algunos de nuestros arcaísmos, como dende, tras cruzar el charco hace siglos, los siguen usando escritores tan reconocidos como Vargas Llosa en obras de ficción para situar al lector ante un escenario determinado y ante una psicología del personaje muy particular o peculiar. Y ese ha sido mi fundamental empeño indagador tras cuantos diccionarios populares he podido agenciarme: demostrar que nuestra peculiaridad la compartimos honrosamente en Extremadura y fuera de ella hasta en América.

Relación alfabética de los más de 3000 términos y expresiones peculiares de este libro.

Al decidirme a escribir para Fuente del Maestre el presente trabajo, decidí la misma estructura del libro "Peculiaridades del Habla de Begíjar" eliminando, claro está, los vocablos no coincidentes con los nuestros y, claro está, añadiendo los nuestros porque en dicho lugar no se den o se hayan omitido. Así lo he hecho, tras comprobar cómo un sesenta por ciento coincidía con nuestros vocablos, y así el lector se percate que el habla popular extremeña, y en especial la fontanesa, mientras esté viva, es digna de consideración porque, además, es entendible en toda el área castellana. Así, creo yo, se ayuda a desvelar la idiosincrasia de nuestro pueblo desde aspectos coincidentes con otros muchos lugares extremeños y fuera de nuestra región.

Dice Francisco Martínez Calle en la introducción a "Peculiaridades del Habla de Begíjar": Una primera aproximación al conjunto de estas peculiaridades, ya desde un punto de vista estrictamente filológico, nos indica que una buena parte del trabajo se centra en el estudio de un conjunto de vocablos compuestos de arcaísmos, de términos en desuso, y de flagrantes vulgarismos. Quizás Francisco Martínez Calle conoce el uso tan generalizado que muchos autores hispanoamericanos hacen de nuestros arcaísmos. Pero como la norma nos dice que lo que en un sitio puede ser actual para la generalidad puede estar en fase de desuso él, justamente, así lo considera. De cualquier modo yo creo, con humildad, que por desidia académica ha habido una tendencia a igualar por arriba el castellano que, cada vez más le asfixia y aplatana, sobre todo al ser usado por muchos autores declarados ciudadanos del Mundo y por muchos locutores y cantamañanas mediáticos que, por otro lado, ni se sonrojan al usar anglicismos ajenos al castellano.

No quiero cansar sobre la valoración que Francisco Martínez Calle hace en cuanto a su trabajo cuando dice: a mayor analfabetismo mayor número de peculiaridades. Yo diría: a mayor instrucción estándar, más pobreza en el lenguaje. No sé en otros idiomas cómo se arreglarán estos asuntos pero, en catalán, tras haber repasado bastantes diccionarios, y poniendo como ejemplo "El Diccionari de la Llengua Catalana" de la Editorial Albertí, 8ª edición de 1982, no he conseguido encontrar reseñado ni un vulgarismo. Esto no quiere decir que no los haya, lo que pretendo hacer ver es que lo recogido, por muy minoritario que sea su uso y desarrollo, se admite y punto; y a nadie se le ocurrirá reírse, por ejemplo, de un hablante del Ribagorza o de la Franja de Poniente. Tanto vale el catalán hablado en Barcelona como el hablado en la Seu de Urgell, en Andorra, en Valencia o en Mallorca, donde por ejemplo el artículo la, por influencia del siciliano, se pronuncia y se escribe sa y nadie se rasga las vestiduras. Así, desde mi punto de vista, lo que procede a los académicos, o a quién corresponda, es recoger, toda el habla popular del área castellana, añadiendo, en todo caso, la coletilla del territorio donde se recoge la voz y punto. Como me dijo una joven concejala fontanesa, se ha de hacer un esfuerzo por parte de todos para que cuando se diga, por ejemplo, papa por patata, no haya la camarera purista de Salamanca que niegue la existencia de éstas hasta que no se le dice patatas. Pues ese vocablo está ya debidamente recogido por la RAE pero, para los puristas de la meseta, aún sigue siendo plato de mal gusto usarlo. ¡Ya ves tú, como si las patatas o las papas pudieran oír y hablar!

Así, entrando ya en materia, en el primer bloque, en orden alfabético y en letra negrita, aparece la relación de términos tratados en su forma popular y, tras barra, en cursiva, la forma estándar. Les sigue a ambas, si coincide con Begíjar, el nombre del fenómeno lingüístico, que separa las dos formas, desechando el resto del tecnicismo gramatical para centrarme, más bien, en hacer una traducción lo más acertada posible. Y que el lector lo sepa: cuando al nombre popular le preceda una b mayúscula en negrita, querrá decir que el término se comparte en Begíjar y otros lugares de Andalucía.

Tos los de La Fuente son conosíos porque disen aseite sebá y tosino. Dicho muy popular en la comarca de los Barros.

Por otro lado quiero, aclarar que, a diferencia de "Peculiaridades"…, "Duende Extremeño Andaluz del Habla en Fuente del Maestre", pretendo sea un libro, más que didáctico, literario. Así he decidido intercalar, entre los términos lingüísticos, pequeños relatos o anécdotas ficticias y el lector no sólo podrá relacionar los términos populares, sino divertirse con las expresiones del narrador y los personajes. Pretendo, en una palabra, que el lector, tanto local como foráneo, no se aburra descubriendo lo que puede conocer total o parcialmente o, cuando sea foráneo, evitar el tedio con unos términos y expresiones que le puedan ser ajenos.

Nos atreveríamos a decir (o yo por lo menos así lo percibí desde niño) que en La Fuente hubo, y, de alguna manera, aún hoy hay, tres maneras de hablar: la de los señores, más cercana al castellano estándar, la de los artesanos y gente de media capa, más mesurada (sin olvidarnos de los forasteros con carrera), y la del jornalero que, por falta de instrucción y dado su medio laboral, se enquistó en, podíamos considerar, el dialecto puro y duro; es como si se hubiese querido distanciar de ambas y, muy especialmente, de la, para él, más chocante o que menos entendía.

Yo he sido testigo, entre los cinco y siete años, de oír a los considerados señoritos, en los años cincuenta, hablar entre ellos prácticamente como el común de los mortales lugareños. Pero, en cambio, al dirigirse a sus jornaleros recurrían a expresiones extemporáneas como por ejemplo a una cuadrilla de aceituneros: hoy la atmósfera no augura nada extraordinario. Y al alejarse el señorito, con sus botas camperas, sus pantalones bombachos, su chaqueta a la inglesa y su visera de jockey, si el manigero le acompañaba, siempre había alguien en la cuadrilla que preguntaba: fulanito, ¿tah enterao de lo q’ha dicho ése? Sí, hombre, que la orilla hoy no predise na del’otro mundo; claro, poh si ehtá el sol rechinando, qué coño quie que pase… Y el jolgorio quedaba asegurado durante un rato largo para terminar el interpelado: el jhoío tonto coño; poh, no, paese un fenómeno con’esa pinta señoritinga que ya no le pega; buah, ¡poh si ehtá máh arruinao cada día!

 

Algo sobre la grafía.

Al tratarse de un libro sobre la peculiaridad fontanesa quiero acercarme todo lo posible al habla de mis paisanos con la máxima fidelidad. Y así ha de ser porque nuestra grafía lo permite y porque estamos hablando del "Duende Fontanés", sin el cual, y sin la debida forma, su peculiaridad lingüística no puede representarse. Pero no sólo mencionando sus vocablos sino también sus frases hechas, sus locuciones especiales, auténticas metáforas, y manifestando aquellas expresiones o palabras que, siendo consideradas correctas, son preferentemente usadas por los hablantes fontaneses en detrimento de las más estandarizadas. Es decir no pretendo ser un purista al revés; pretendo haber recogido los localismos y lo que siendo, más o menos, de uso general, en La Fuente, lo particularizamos.

En cuanto a las aspiraciones de la h, a diferencia de las j, g y s intercaladas y al final, es necesario aclarar que no todas se aspiran; así tenemos que hilacha, en singular, no se aspira, ni huraño, ni humor; ni la mayoría de los verbos que empiezan con h, en todas sus acepciones, se aspiran; en cambio arrear, que no lleva h, sí que se aspira.

Sobre este extremo no nos alargaremos excesivamente. Para no cansar al lector con un preámbulo pesado, sólo señalaremos las cuestiones más evidentes y luego en cada letra del abecedario, si procede, daremos alguna explicación más exhaustiva.

Decir, para los no fontaneses o no comarqueños, o no extremeños, que en Fuente del Maestre, antiguamente Fuente Roniel, se sesea; es decir: la c y la z se pronuncian como s alveolar. Diríamos más pronunciada, más sonora que en Andalucía de ahí su posible origen lusitano. Por otro lado la ll se pronuncia hasta por las personas más iletradas. Y estos dos fenómenos lingüísticos son únicos en su entorno más inmediato. Es decir: ni en Feria, ni en Villalba de los Barros, ni en Almendralejo, ni en Villafranca de los Barros, ni en los Santos de Maimona, ni en Zafra que circundan a Fuente, se da ese fenómeno. Que yo sepa en Talavera la Real se sesea y parece ser que también usan la ll como nosotros.

Dicho esto diremos que la j, la h y la g se aspiran como f inicial latina. Qué grafía usar para representar ese sonido fue para mí un dilema porque no me gusta representarlo simplemente con la h como tradicionalmente se ha venido haciendo. Por tanto, salvo error u omisión, con la jh represento todos los sonidos aspirados de j y h. Ejemplo: a rajatabla: a rajhatabla, hambre: jhambre. Y con la gh se representa el sonido aspirado como por ejemplo ghente.

Al tratarse de una aspiración de s intercalada o al final del vocablo, será representada como h. Ejemplo: estamos o no estamos: ehtamoh o no ehtamoh. También la s antes de f suele desaparecer ejemplo: asfixiar: afisiá.

La c antes de consonantes desaparece o se aspira como por ejemplo: ahtivo o hate la cama. Con la cc, ejemplo: eccehomo, al desaparecer una de las letras y al sesearse la otra, se produce una alteración para sonar esehomo.

A la x sencillamente se la ignora y se pronuncia s o se aspira si la precede una consonante. Ejemplo: explotar: ehplotá. Exógeno: esógheno.

La g antes de n suele desaparecer y, cuando no, es aspirada como h ejemplo: maligno: malino. magnolia: mahnolia.

Sobre la r intercalada en los verbos pronominales, suele desaparecer y también al final de las palabras ejemplo: ensordecerse o ensordecer: ensordesese o ensordesé. Y siendo así las palabras que sólo reúnan estas particularidades no serán recogidas si no reúnen alguna particularidad o analogía con vocablos ajenos.

En lo concerniente a la l desaparece al final de algunos vocablos ejemplo: jornal: jhorná. Manuel: Manué.

La d desaparece en muchos casos pero al final se la ignora sin paliativos en todas las palabras ejemplo: maldad: maldá.

En lo tocante a la grafía propiamente dicha también es necesario aclarar que, la v, al haber ido perdiendo valor fonológico, no se suele usar cuando de escribir en extremeño popular se trata. Y así lo haremos nosotros tanto en los vocablos peculiares como en los comentarios que refuercen el habla autóctona de Fuente del Maestre, el lugar, posiblemente, más dicharachero y bromista de España. Insistimos, en los vocablos considerados peculiares, todo y su valor ortográfico en el castellano estándar, hemos sustituido la v por b. En este sentido seguimos la pauta del profesor Antonio Viudas Camarasa y la mayoría de autores extremeños, salvo cuando insertemos vocablos coincidentes con los nuestros, recogidos de Andalucía por los profesores Francisco Álvarez Curiel, Francisco Martínez Calle o los de la profesora y fontanesa María José Porro Herrera que también ha realizado su trabajo aplicando la grafía estándar.

Y tras esta aclaración diremos, no obstante, que, salvo error u omisión no recogeremos como peculiares aquellas palabras que simplemente las distingan los rasgos más arriba mencionados si no es porque sea un vocablo muy arraigado o reúna alguna analogía digna de mención.

Un comentario más sobre los diminutivos. En Fuente se usan ampliamente y hasta llegar a la exageración. Pero terminan en ino. Ejemplo: chiquito: chiquino. Chiquetito: chiquenino. Chiquerretito: chiquerrenino.

Otra aclaración para el lector es que si hemos reforzado nuestra peculiaridad buscando coincidencias y analogías en Extremadura y fuera de ella es para, en lo posible, espantar el fantasma, muy manoseado por gente que desconoce el valor de su habla, sobre que en La Fuente se habla muy mal. Y no creemos que sea así porque la mayoría de las personas sí valoran su peculiaridad. Hemos querido demostrar, sin entrar en si nuestro dialecto está más o menos emparentado con el leonés oriental, a nuestros paisanos, que nuestras peculiaridades lingüísticas las comparten muchos pueblos y personas en el oeste y sur peninsular y hasta en América. Por tanto, ni complejos ni cortedades al expresarnos en el dialecto castellano que hemos mamado. Aprendamos en ese sentido de los andaluces; éstos no se arredran ni en los medios audio visuales ni en el habla coloquial al expresarse en su acento peculiar. ¡Y a aquellos, que lejos de nuestra tierra, al sentirnos hablar, nos digan que olemos a retama y a encinares, digámosles: vosotros oléis a muerto; porque lo que hablan es un castellano no de laboratorio sino de catacumbas funerarias! Yo no quiero reclamar todos nuestros considerados vulgarismos para que sean recogidos, pero sí hay muchísimas palabras y metáforas, algunas recogidas ya de Hispanoamérica, que están reclamando, con su origen, su sitio donde les corresponde.

El nuestro, paisanos, es un castellano vivo y eficaz. Es un castellano que el pueblo ha ido modelando a medida de sus necesidades o para apartarse del habla estándar porque quien la emitía era un jinete cabalgando en las espaldas agobiadas del sacrificado pueblo.

Y un apunte final: yo, tras repasarme el diccionario de la RAE, el "Vocabulario Popular Andaluz", "Peculiaridades del Habla de Begíjar" y el "Diccionario Extremeño", creo, con humildad que, muy posiblemente, Fuente del Maestre sea el pueblo de España que más peculiaridades haya desarrollado y mantenido. Felicitémonos por ello y hagamos todo lo posible, digan lo que digan cuatro jhediondoh, por conservar este patrimonio cultural popular del que con el tiempo muchos sentirán envidia. Que naiden noh traiga a mal traé por nuehtra peculiá manera d’hablá. Que se acabe ese medio hablar acomplejado entre finolis y fontanés. En la familia de habla castellana o cabemos todos o no cabemos ninguno.

Al finalizar esta presentación es de justicia hacer una mención especial al trabajo que, desde la Universidad de Córdoba, ha realizado María José Porro Herrera sobre nuestra coincidencia con muchos vocablos hispanoamericanos y Algunas regiones peninsulares. Se trata de un artículo de homenaje que amablemente ha consentido en autorizarme usar en este vocabulario. Y le debo un doble agradecimiento por prestarse, incondicionalmente y a sabiendas de mi autodidáctica formación, a prologar mi humilde trabajo. Así, María José Porro Herrera, nacida En Fuente (hija de don Clemente Porro, profesor de primaria), pero, como yo, durante muchos años forastera, debe llevar a su pueblo entre sus entresijos más íntimos. Pues los que mamamos en nuestra infancia el magma fontanés y luego nos transplantaron, no sabemos si nos duele o nos emociona a la vez. Lo fontanés es que es mu fuerte, chacho. Su memoria de licenciatura, de la que me habló por casualidad un fontanés, Antonio Bardón Domínguez, antiguo bibliotecario, es un lujo merecido para la mayoría de los fontaneses.

María José Porro Herrera tras mencionar los fastos de 1992, nos dice: Dialectólogos y lingüistas son los llamados a clarificar cuestiones de influencia de las distintas hablas castellanas en el proceso colonizador…Aquí solamente queremos poner de manifiesto la vigencia en tierras hispanoamericanas de determinadas voces de uso común todavía hoy en un pueblo extremeño: Fuente del Maestre (¡chachoh!, ¿no boh se pone carne gallina?). Algunas son comunes a usos andaluces, leoneses o aragoneses, respondiendo así a las distintas influencias que las circunstancias históricas de esa localidad han ido propiciando: conquista leonesa primero, comunicaciones abiertas con Andalucía Occidental después, aislamiento posterior, etc.

Así me he propuesto que toda su aportación quede reseñada en "Duende Extremeño Andaluz del Habla en Fuente del Maestre" marcando los vocablos de su trabajo con sus iniciales y el país o los países donde coinciden con los nuestros.

Con esto no se cubrirá el vacío que todas las autoridades, que han pasado por el ayuntamiento fontanés, le han hecho a su aportación. Pero en algo ayudaremos a homenajear un trabajo y a una persona que, en unos tiempos en los que nadie pensaba en estas cosas, ella agasajó a su pueblo por encima de todo. Y ya que por agobio, olvido o ignorancia, nadie en la administración local o autonómica, se había preocupado de publicar tan digno y embellecedor trabajo, nosotros lo adjuntamos.

De los otros tres autores, salvo error u omisión, sólo se ha recogido lo coincidente o que posea alguna analogía con nuestros vocablos o frases hechas. Con esto quiero señalar que no es un plagio o mera copia, pues, tras descubrir las analogías, me ha inducido a citarlos el hecho de presentar al lector, especialmente fontanés, un cuadro, lo más amplio posible, sobre la extensión, fuera de nuestro entorno, de la mayoría de nuestra peculiaridad. Así espero contribuir a espantar ciertos complejos arrastrados por algunos fontaneses y fontanesas que huyen de su acento para no considerarse mal hablantes.

Una apostilla final sobre los comentarios que salpican todo el vocabulario. Éstos están dirigidos a animar el libro haciéndolo más ameno y divertido y a reforzar el entendimiento sobre aquellos vocablos más confusos. Sobre los motes, al haber vivido desde mi niñez fuera del pueblo, no conozco a nadie por ellos; así han sido escogidos al azar o alterados para evitar susceptibilidades. Quiero decir que no pretendo molestar ni incordiar a nadie. Y, porque creo conocer a mis paisanos y su dicharachera simpatía, entenderán que los comentarios son pura ficción con los que nadie debe sentirse aludido.

No puedo terminar esta parte de la introducción sin hacer una pequeña referencia a la manera de contar el tiempo de las horas en Fuente. Hoy no se si aún se conserva pero, en mi niñez, se hacía muy parecido a como aún se hace en Cataluña donde se cuenta el tiempo de cuarto en cuarto de hora. Y si, en Fuente, alguien preguntaba por la hora solía contestarse: ahora ha dao el reló un cuarto pa lah treh; o son la media pa lah treh; o son treh cuartoh pa lah treh. En Cataluña se dice un cuarto de tres; dos cuartos de tres; o tres cuartos de tres. Curioso ¿no?

Algo sobre la bibliografía.

Ésta está basada fundamentalmente en "La Enciclopedia" última versión de La Real Academia de la Lengua de Salvat Editores, Barcelona 2003. También hay que mencionar al "Diccionario del Estudiante", Real Academia Española, de Santillana Ediciones Generales, Barcelona 2005. Y una mención especial al "Diccionario de le Lengua Española de Espasa Calpe, S. A.

El "Vocabulario Popular Andaluz" del profesor Francisco Álvarez Curiel, editorial Argubal, Málaga 1997.

"Chozos en Fuente del Maestre" de la Imprenta Rayego, de Juan Antonio Blanca Pecero, cuyo autor me brindo desinteresadamente todo el vocabulario popular relacionado con su libro.

"Peculiaridades del Habla de Begíjar", del profesor Francisco Martínez Calle, Editorial Local, José Luís, 2003 -y que llegó a mis manos de forma contradictoria por no decir rocambolesca-, fue lo que me despertó induciéndome a escribir lo que el lector tiene ante sus ojos.

El homenaje de licenciatura de la fontanesa María José Porro Herrera, "Vocabulario Extremeño e Hispanoamericano: Algunas coincidencias", le da a éste humilde trabajo, con su extensa bibliografía, su dimensión, si es que la tiene, universal:

Diccionario de la Lengua Española. Madrid, Espasa-Calpe, 1984. 20ª ed.

Aguilera Patiño, L.: El panameño visto a través de su lenguaje. ¿Panamá? Férguson & Férguson, (sa).

Alcalá Venceslada, A.: Vocabulario Andaluz. Andujar, 1924.

Alonso Garrote, S.: El dialecto vulgar leonés hablado en Maragatería y tierra de Astorga. Notas gramaticales y vocabulario. Madrid, C.S.I,C., 1947.

Alvar, M.: El Español Hablado en Tenerife. Madrid, C.S.I.C.,1959.

Arona, J. Diccionario de Peruanismos. Paris, Desclée de Brouwer, 1938.

Baráibar y Zumárraga, F.: Vocabulario de palabras usadas en Álava y no incluídas en el Diccionario de la Real Academia Española. 13ª edición. Madrid, Memorias de le Real academia Española, 1903.

Batres Jáuregui, A.: Provincialismo de Guatemala. Guatemala, 1982.

Rayo, C.: Vocabulario criollo-español suramericano. Madrid, 1910.

Bolio, E.O.: Mayismos, barbarismos y provincialismos yuacatecos. Mérida de Yucatán, 1931.

Borao, J.: Diccionario de voces aragonesas. 2. ed., con prólogo y notas de D. Faustino, Sancho y Gil, más "Colección de voces usadas en La Litera", por Benito Col y Altabás y "Colección de voces de uso en Aragón", por Luís V. López Puyolés y José Valenzuela de la Rosa. Zaragoza, 1908.

Buesa, T.: "Americanismos", en Alvar el alii: Enciclopedia Lingüística Hispánica. Madrid, C.S.I.C., 1967.

Calcaño, J.: Resumen de las actas de la Academia Venezolana (…). leído en (…). 27 de octubre de 1886.

——: El Castellano de Venezuela. Estudio crítico. Caracas. Mº de Educación, 1949.

Castellón, H.A.: Diccionario de Nicaragüismos. Managua. 1939.

Cevallos, P.J.: Breve catálogo de errores en orden a la lengua y al lenguaje castellanos. Quito, 1904.

Cuervo, R.J.: Apuntaciones críticas sobre el lenguaje bogotano. París, 1914. 6ª ed.

Diccionario Manual de Americanismos. Direc. textos, prólogo y bibliografía de marcos A. Morínigo; Buenos Aires, Muchnik Editores, 1966.

Gagini, C.: Diccionario de barbarismos y provincialismos de Costa Rica. San José de Costa Rica, 1892.

García de Diego, V.: "Dialectismos Castellanos", R.F.F., C.S.I.C., 1916.

García Lomas, A.: El lenguaje popular en las montañas de Santander. Centro de Estudios Montañeses, 1949.

García Rey, V.: Vocabulario del Bierzo. Madrid, Centro de Estudios. Archivo de tradiciones Populares, 1934.

García Soriano, J.: Vocabulario del dialecto murciano con un estudio preliminar y un apéndice de documentos nacionales. Madrid 1932.

Garzón, T.: Diccionario Argentino. Barcelona, 1910.

González Guzmán, P.: El habla viva del valle del Argües. Zaragoza, C.S.I.C., 1923.

Kruger, F.: el dialecto de San Ciprián de Sanabria. Madrid, C.S.I.C., 1923.

Macias, J.M.: Diccionario cubano. Veracruz 1886.

Malaret, A.: Diccionario de provincialismos de Puerto Rico. San Juan de Puerto Rico. Centro de Estudios Históricos R.F.F., 1917.

Membreño, A.: Provincialismos de Honduras. Nicaragua, 1887.

Monner y Sanz, R.: Notas al Castellano en Argentina. Madrid, 1917.

Morales Pettorino, F.: Diccionario ejemplificado de chilenismos. 4 vols. Valparaíso. Univ. de Playa Ancha, 1984- 1987.

Onís, F. de: "Notas sobre el dialecto de San martín de Trebejo". Tod.. Memorial Volumen. Nueva York, Philological Studies, Columbia University, 1930.

Ortúzar, C.: Diccionario Manual de Locuciones Viciosas. Barcelona, 1902.

Patín Maceo, M, a.: Dominicanismos. Ciudad Trujillo, 1947.

Patrón Peniche, P.: Léxico Yucatano. (Barbarismos, Provincialismos y mayismos). Méjico, 1932.

Pichardo, E.: Diccionario provincial de voces cubanas. La Habana, 1862.

Rabanales, A y L. Contreras (eds).: El habla culta de Santiago de Chile. Materiales para su estudio. I, Santiago de Chile, Univ. de Chile, 1979.

Ramos y Duarte, F.: Diccionario de Mejicanismos. Méjico, 1898.

Rato y Evia, A.: Vocabulario de palabras y frases bables. Madrid, Tip. M. Ginés Fernández, 1891.

Restrepo, R.: Apuntaciones idiomáticas y correcciones del lenguaje. Bogotá, Impr. Nacional, 1955. 2º ed.

Revollo, P. Mª.: Costeñismos y colombianismos o apuntaciones sobre el lenguaje costeño de Colombia. Barranquilla, 1942.

Rodríguez, Z.: Diccionario de chilenismos. Santiago de Chile, 1875.

Román, M, a.: Diccionario de chilenismos. Santiago de Chile, 1901 – 1908. 5 vols.

Rubio, D.: La anarquía del lenguaje en la América. México, 1925.

Salazar García, S.: Diccionario de provincialismos y barbarismos centroamericanos. San Salvador, 1910.

Sánchez Sevilla,: "El habla de Cespedosa de Tormes (en el límite de Ávila y Salamanca")., R.F.E., XV, 1928.

Sandoval, L. (1914 – 42).: semántica guatemalteca o Diccionario de Guatemaltequismos. Guatemala, A.C.

Santamaría, F. J.: Diccionario de Mejicanismos. Méjico, Porrúa, 1959.

Santos Coca, A.: "Vocabulario extremeño", revista del Centro de Estudios Extremeños, XIV, (1940).

Segovia, L.: Diccionario de Argentinismos. Buenos Aires, 1911.

Steel, B.: Diccionario de Americanismos. ABC of Latin American Spanish. Madrid, SGEL, 1990.

Suárez, M.V.: El Español que se habla en Yucatán. (Yucatán)., eds. Díaz Massa, 1945.

Sundheim, a.: Vocablo costeño o lexicografía de la región septentrional de Colombia. París, 1922.

Tascón, L.: Diccionario de provincialismos y barbarismos del Valle del Cauca. Bogotá. (sa).

——: Quechuismos usados en Colombia. Bogotá.

Tobón, A.: Cartilla del folklore Tolinese. Ibagué (Colombia)., 1935.

Tovar y R., A.: Identidades y diferencias en el habla de peruanos y portorriqueños. Santiago de Chile, boletín de la Academia Chilena, 1943.

Valle, A.: Diccionario del habla nicaragüense. Managua, 1948.

Vergara Martín, G.: Cuatro mil palabras y algunas más no incluidas en el "Diccionario de la Real Academia Española" de la 15ª edición o que están en otras acepciones o como anticuadas. Madrid, 1925.

——: Diccionario Hispano Americano de voces sinónimas y análogas. Madrid 1930.

Vidal Batín, B.E.: El habla rural de San Luís. Buenos Aires, 1949.

Yrarrazábal Larrain, J.M.: Chilenismos. Santiago, 1945.

Zamora Vicente, A.: El habla de Mérida y sus cercanías. Madrid, C.S.I.C., 1943.

Y por último "El Diccionario Extremeño", auto edición, Cáceres, 1988, del profesor Antonio Viudas Camarasa, el cual, cuando reciba nuestro trabajo, se sorprenderá por lo poco que a él le había llegado de La Fuente a la que sólo puede mencionar en dos ocasiones.

Claves para un mejor entendimiento del vocabulario.

VPA, estas siglas corresponden al "Vocabulario Popular Andaluz" del profesor Francisco Álvarez Curiel.

Todos los párrafos iniciados con B mayúscula, en negrita y seguida de guión, corresponden a coincidencias o analogías entre nuestro vocabulario fontanés y el del pueblo de Begíjar de la provincia de Jaén. De este diccionario es autor el profesor Francisco Martínez Calle con su libro "Peculiaridades del Habla de Begíjar".

MJPH, estas siglas corresponden a la profesora María José Porro Herrera y jalonarán, en cada vocablo o locución por ella reseñado, toda su aportación.

(DExAVC estas siglas señalarán siempre al "Diccionario Extremeño" y a su autor el profesor Antonio Viudas Camarasa.

Cuando aparezcan las siglas NIDRA, no incluida en el Diccionario de la Real Academia, siempre nos referiremos a los vocablos, recogidos en el territorio peninsular; son los del trabajo de la Doctora María José Porro Herrera por haberse basado, entre otros, en la labor de Vergara Martín, G. "Cuatro mil palabras y algunas más no incluidas en el Diccionario de la Real Academia Española de la 15ª edición". En cambio cuando aparezcan estas iniciales RAE, Real Academia Española de la Lengua, querrá decir que, en parte o en su totalidad, el vocablo señalado coincide con la Academia Española, porque haya sido recogido recientemente, como ocurre en la mayoría de los casos, o porque coincida de antes. De ningún modo esto desautoriza el trabajo de la doctora María José Porro Herrera, de la que estoy gratamente agradecido; simplemente es que la RAE, en su última edición, aunque con innumerables coletillas que deprecian los términos populares, ha recogido muchos extremeñismo aunque cite Andalucía, Hispanoamérica o cualquier otro lugar de España; y la tesis de nuestra paisana es bastante anterior a la última edición de la RAE.

Aclaración final.

En el segundo bloque, también por orden alfabético, se hallan los términos populares del siguiente modo: al comienzo y en cursiva, aparece el término estándar y luego el popular en letra negrita; luego, si ha lugar, se citará el diccionario o diccionarios correspondientes o, de no figurar en ellos, el localismo si es que lo hubiera.

Los comentarios, para aquellos lectores que lo prefieran, en el segundo bloque, los hemos escrito en castellano estándar.

Abreviaturas gramaticales:

adj adjetivo

adv adverbio

apóc apócope

coloq coloquial

conjug conjugación

despet despectivo

det determinado

expr expresión

indf indefinido

interj interjección

intr intransitivo

loc locución

m masculino

pl plural

pres presente

prep preposición

prnl pronominal

pron pronombre

pl. plural

tr transitivo

 

 

 

A

ab’allá. interj. coloq. / está claro. 2. ea. Posible localismo.

abahto. m. / bastar. MJPH, ser bastante o suficiente a una cosa, compartido con Aragón como abasto. RAE.

abajhá. tr. / bajar. RAE, recogida como abajar. (DExAVC compartido con Hurdes y otros pueblos como abahar). Y, cuando señalamos las poblaciones donde han sido recogidos los vocablos coincidentes con los nuestros, el mismo profesor Viudas Camarasa, indica que eso no quiere decir que no sean usados en otros lugares.

abajhé. tr. / bajé. (DExAVC compartido con Hurdes y otros pueblos).

B- abajote. / abajo. Por sufijación. Queriendo señalar, en La Fuente, no sólo abajho, sino lejos.

abansase. prnl. / abalanzarse. (DExAVC como abanzarse). MJPH, compartido con Arg y Urg, como abalanzarse. Admitida por la RAE

abarcá. tr. / abrazar. RAE como abarcar, rodear algo, especialmente, con los brazos.

Comentario: Chacho, cómo m’abarcó la jhoía puñetera. En’un momento dao m’abarcaba con toah suh potenteh fuersah. Y, con loh ojhinoh en blanco, paésía que se moría. Los comentarios, para matizar nuestra peculiaridad, irán en cursiva y así diferenciarlos de las acotaciones de otros autores.

abarejhón. m. / golpe fuerte o repetido al varear olivos. Compartido con el VPA como palo de varear y golpe: vareón.

abariseh. f. pl. / varices. Posible localismo.

abaté. adv. / casi. Posible degeneración de a ver si te. (DExAVC compartido con Trujillo, Alcuéscar, Villafranca de los Barros y Hurdes).

a bé. 2. ábe. loc e interj. / a ver. Se usa mucho en la comarca de los Barros.

Comentario: En’el baile me quiso manoseá y allí que lo dejhé máh plantao q’una jhiguera; ábe.

abentá. tr. / lanzar. (DExAVC compartido con Albalá como abentarse: hacer novillos. RAE, aventar, recoge varias acepciones de Hispanoamérica que creemos no coinciden con lanzar, tirar.

a bé qué pintah. expr. / a ver qué haces.

aberiguasioneh. f. / discusiones, líos.

a bé si bamoh a ehtá o noh ban allebá. expr. / aclarar, determinar. Posible localismo.

abiá. tr. / cocinar. 2. arreglar algo, máquina o utensilio. Compartido con el VPA. "Se dice de la comida caliente con cuchara. La comida en frío es a pulso". MJPH de Argentina, 1ª acepción, como aviar. Admitida por la RAE como avíos.

abiáte. adv. / prepárate. 2. confórmate.

abocao, cá. adj. / inevitable, a punto de actuar. (DExAVC). RAE como abocado.

abrí. tr. / despejarse la atmósfera.

abridó. m. / albaricoque. RAE, abridero.

abriéro de boca. loc. / bostezo. Compartido con el VPA.

Comentario: ¡Chacho!, cómo me s’abre la boca. Eso eh de jhambre. ¡Qué jhoío piojhoso éhte! Jhambre la tuya que no t’hah comío un troso tosino dende enanteh la guerra.

abrí un’ojho como una chahtaña. expr. / alegrarse de algo. Sólo señalaremos como variantes fontanesas aquellos vocablos que además de h aspirada les diferencie en alguna otra particularidad.

abufase. prnl. / abombarse las paredes por la humedad. Compartido con el VPA.

abujha. f. / aguja. Compartido con el VPA. MJPH abuja de Aragón y NIDRA. RAE.

aburrise. prnl. / secarse un árbol. (DExAVC).

Comentario: Ya s’haburrío el’almendro. Claro si lluebe menoh que en’un desierto. ¡No se ba a aburrí! ¡Si ehto continúa asina qué será de lah criaturah en loh añoh beniéroh!

acabao. adj. / completo. RAE como acabado.

acada beh. loc. / cada vez. Posible localismo.

acagatase. prnl. / asustarse. (DExAVC compartido con Cáceres como acagazase).

a campo atrabiesa. expr. / a campo a través. Usado por Vargas Llosa en "Lituma en los Andes" como atraviesa.

achantase. prnl. / rendirse. Compartido con el VPA como achancarse. (DExAVC compartido con La Pesga como achahtasi). MJPH de Andalucía, Álava, Puerto Rico, Méjico y NIDRA como achantarse. RAE.

achicoria. f. / chicoria. RAE admite los dos términos.

achiperreh. m. / trastos viejos. (DExAVC compartido con Mérida, Hurdes, y Serradilla; y en Guareña como archiperreh).

achumbaíto. adj. / árbol muy cargado. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván).

B- acibuche. / acebuche, por alteración. En Fuente aseuche. (DExAVC compartido con San Vicente de Alcántara, Barcarrota, Villanueva del Fresno y Burguillos del Cerro como azauche).

B- acituna. / aceituna, por monoptongación y alteración. En F. asituna.

acollerá. tr. / emparejar. RAE, en la Argentina, acollarar.

acollerase. prnl. . / avenirse. (DExAVC).

acompañao, ñá. adj. / de adecuadas proporciones. (DExAVC).

aconduchá. tr. / distribuir, regularizar. (DExAVC). RAE como proveer de conducho.

a contá loh fraileh. loc. / mentir a los niños al preguntar dónde vamos. Compartido con el VPA.

Comentario: Mame, ¿aónde bah a ehtah horah y con lo que lluebe? A contá loh fraileh que falta uno. Poh no bayah tú; mejhón que baya pape y me buhque un puehto entre elloh, poh, según dise él, no dan golpe.

a contra pelo. loc. / a la contra. RAE.

acoquiná. tr. / apoquinar, pagar.

Comentario: Benga, acoquina; que a ti te guhta mucho imbitá pero a la hora de pagá no te se be el pelo lihto que tieneh.

acordá. tr. / recordar. MJPH, del NIDRA. RAE, entre otras bastantes acepciones, la recoge como acordar, traer a la memoria.

acorré. tr. / recorrer, correr. (DExAVC compartido con Hurdes). RAE como acorrer.

a cosa hecha. loc. adv. / a propósito. Compartido con el VPA como a cosita hecha.

B- acotizar. / cotizar, por prótesis de a. En F. acotisá.

acredó, ra. adj. / acreedor. Posible localismo por desaparecer una de las e y la r final. Así miraremos de no repetir otras expresiones con la misma alteración.

acuerdo. m. / idea, pensamiento. RAE.

adióh. interj. / saludo de recibimiento y despedida.

adisión. f. / adicción. Posible localismo.

adito, ta. adj. / adicto. Posible localismo.

adormí. tr. / dormir. RAE.

adotriná. tr. / adoctrinar. RAE como en desuso.

adré. adv. / a propósito, aposta. MJPH del NIDRA como a dredes. Como con posible origen gótico, at ret, a consejo, es plenamente recogido por la RAE como adrede.

adrento. adv. / dentro. Posible localismo.

a farolasoh. loc. / pelearse, reñir.

afechá. tr. / cerrar. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván y Coria; como fechadura en Mérida y Coria; como apachá en La Pesga y, como apechar en Hurdes y Sierra de Fuentes).

Comentario: ¡Chacho!, disen q’anda suelta una pantarujha po’l pueblo que se salta hahta por loh corraleh. A mí eso no me procupa. Yo cuando salgo p’abajho echo la tranca a la puerta del corrá y la de la calle la afecho y me traigo lah llabeh pa bajho. ¿Y no te da pena dejhá a la mujhé enserrá? ¿Pena?, pena nenguna. La mujhé que s’apañe con la cohtura jhunto a la bentana. ¿Y si te entra la pantarujha por el bentano? ¡Oh la madre que te p, mañana pongo una rejha, cómo lo sabeh!

afetá. tr. / afectar. Posible localismo.

afilón. m. / afilado rápido. Compartido con el VPA. RAE correa de los barberos.

afitá. tr. / afeitar.

B- afoto. / foto, por prótesis. Compartido con el VPA.

B- afusilá. / fusilar, por prótesis y ensordecimiento. Compartido con el VPA. MJPH de Andalucía y Argentina como afusilar.

a gahtoh pagoh. loc. / ir gratis. (DExAVC compartido con Trujillo).

agallah. f. / tener agallas, ser astuto, hábil. MJPH de Puerto Rico, Méjico y NIDRA como agallas. RAE.

agarraérah. f. / asas. 2. influencias. fig. (DExAVC compartido con las Hurdes). Compartido con el VPA como tirón. MJPH, como agarraderas: influencias, en Puerto Rico, Argentina y Andalucía. RAE como influencias la recoge de Argentina.

Comentario: oye, m’han dicho que tu besino el Jhornilla ha colocao al tonto su hijho en la diputasión. Ábe, eh que tú no sabeh que ese tie buenah agarraérah. ¿Y de ónde le bienen? Cualquia sabe; su mujhé da muchoh biajheh a Badajhó.

agarrón. m. / impulso fuerte. 2. altercado, enfrentamiento. Compartido con el VPA. RAE le da el mismo significado que agarrada.

Comentario: ¿Tú sabíah que el Linde y el Lagarto no s’hablan? Sí, hombre. Esoh tubieron un’agarrón q’abaté se matan. ¡Chacho!, poh yo, dao que no lo bide, no sabía ni pío.

agateá. tr. / andar por el suelo. 2. trepar. (DExAVC compartido con Guareña, Mérida y Hurdes) La 1ª acepción compartida con Cuba como gatear: el niño ya gatea. Compartido con el VPA.

aghila. adv. / corre, vete.

aghilá. tr. / caminar, andar. (DExAVC compartido con Guareña, Trujillo, Montehermoso y Mérida como ahilar y de Valencia de Alcántara como ahilá). MJPH, como agilar de Puerto Rico, Arg., Mérida y sus alrededores.

agua calaéra. loc. / lluvia lenta. Posible localismo.

B- aguacil. / alguacil, por aféresis y alteración. En la F, aguasí.

aguachirri. m. / bebida insustanciosa. Compartido con el VPA. RAE como aguachirle.

agua lloberisa. adj. / agua llovediza, recogida de las canaletas.

aguapero. m. / azufeifo. Posible localismo.

B- aguardiente. / anís, por identificación de significado.

aguatero, ra. adj. / aguador. (DExAVC compartido con Hurdes). RAE propio de Argentina.

B- agüelo. / abuelo, por alteración. Compartido con el VPA.

agüelo. m. / cochinilla. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván).

Aguhto. n. / Augusto.

aguilucho. m. / cernícalo. (DExAVC compartido con Zarza Capilla, Campillo de Llerena y Valle de la Serena).

aguoso, sa. adj. / acuoso. Posible localismo.

ahora doh añoh. loc. / hace dos años. Hay que señalar que, coloquialmente, se usa mucho "ara" en lugar de ahora.

ahora mihmito. loc. / en este instante. Compartido con el VPA.

ahora o ara poco. loc. adv. / hace nada. Compartido con el VPA.

ahpeto. m. / aspecto. Posible localismo.

ahpué. adv. / anteriormente. Posible localismo.

Comentario: El Pucherito, ehte año ha echao meloneh y no duerme pensando en que se loh puán quitá. Buah, poh que no se enrite tanto que ahpué he bihto al Picaéra con’un serón hahta loh cojhoneh. Poh si ése no ha’chao meloneh. Él no loh ha’chao porque dise que pa qué si hay otroh que loh siembran pa él.

aijhón. m. / planta silvestre con sabor anisado.

airaso. m. / fuerte viento, constante. Compartido con el VPA y RAE como airazo..

aire. m. / hemiplejia. (DExAVC).

Comentario: ¿Hah bihto a la chiquina de tu compadre El Meonsino? No, ¿poh qué le pasa? Na, que l’ha dao un’aire y l’ha puehto la cara al rebé. Abaté y la boca le queda en la nunca. Algo desagherao.

aire. interj. 2. jhumo. iterj. / vete fuera, largo. 2ª acepción compartida con el VPA.

ajhinaéro. m. / gran preocupación (DExAVC compartido con Zarza de Granadilla; y, en Cáceres y Hurdes, como congoja y tristeza).

ajhinao, ná. adj. / preocupado, angustiado. (DExAVC compartido con Hurdes y Zarza de Granadilla).

ajhogá. tr. / ahogar. Dado que la h intercalada, excepto en ahora y ahuyentar, se suele aspirar, sirva este ejemplo para todos los demás vocablos.

ajhogase en’un baso de agua. expr. / aturdirse por nada. Posible localismo.

Comentario: el Canana cada día ehtá máh peó. Ese probesino ya se sabe: siempre s’ajhogó en’un baso d’agua. Y suh muchachoh l’han salío hahta drogatah. Caté, chacho; esa casa eh un’ajhinaéro. ¡Que no noh caiga una carga d’esah ensima!

ajhoguina. f. / sofocón, ahogos 2. rapidez con ansias de conseguir algo. (DExAVC).

ajho porro. m. / ajo silvestre. (DExAVC compartido con Badajoz y otros lugares).

ajhucheá. tr. / azuzar. Compartido con el VPA como ahuchear: azuzar para levantar la caza.

Comentario: Y que qué tollina se dieron el’otro día El Lejhía y El Pitillo. Ya m’he enterao que habieron unoh cuantoh que loh jhuchearon. ¡Eh que hay que be lo maloh que semoh! En contra de desapartá, ensienden máh el fuego.

ajhuellá. tr. / azotar. (DExAVC compartido con Zarza de Granadilla como ahuellal: vencer).

ajhuhtá. tr. / convenir, concertar. MJPH ajustar del NIDRA. Admitida por la RAE

ajhuí. intr. / huir. Posible localismo.

a jhumo pajha. expr. / de cualquier manera, a la ligera. Posible localismo.

ajhunco. m. / agobio. (DExAVC compartido con Monroy, Trujillo, Alcuéscar y Mérida).

ajhundise. prnl. / hundirse. (DExAVC compartido con Mérida).

a la babia. loc. / de cualquier manera.

alabansia. f. / alabanza. RAE alabancia.

a la birulé. loc. / poner un ojo morado. Posible localismo.

a la chita callando. loc. / calladamente, sin sentir. RAE.

a la fiehta iremoh. loc. / seguro, ya lo veremos. Posible localismo.

a lah clarah. loc. / públicamente.

a lah cohtillah. loc. / a la espalda. Posible localismo.

a lah primerah de cambio. expr. / cuando quise darme cuenta.

alanghino, na. adj. / natural de Alange. (DExAVC).

alantá. tr. / adelantar. (DExAVC compartido con Hurdes).

alante. adv. / adelante. Usado por Lipe Collado en su novela "Después del Viento". MJPH como vulg. de León, Santander, Murcia y Puerto Rico.

alantrito. adj. / de los primeros, de los principales. MJPH de la Maragatería, Tenerife, Tierras de Astorga y Santander alantre. Asturias, del Bable, adelantre. Puerto Rico alantito.

a la orilla. loc. / al lado, cerca. Compartido con el VPA como "ponte a la orilla de tu hermano".

a la que salta. expr. / a la expectativa. Compartido con el VPA "como no tiene trabajo fijo, siempre está a la que salta2.

B- albaca. / albahaca, por fusión de vocales. En F. albeaca. (DExAVC compartido con San Vicente de Alcántara y Mérida como albeaca). RAE como albaca.

albardalería. f. / taller de guarnicionería. (DExAVC compartido con Coria y RAE como albardería).

albejharuco. adj. / abejaruco. 2. bruto, ignorante. (DExAVC compartido con Mérida, Hornachos, Trujillanos, Berlanga, La Codosera, Fuente de Cantos, Valencia de Mombuey, Valdetorres y Orellana la Vieja. La 2ª acepción compartida con Trujillo como abejaruco, fig. bruto). RAE chismoso, correveidile.

albejhineh. m. / arbejas. (DExAVC compartido con el norte de Cáceres como albesines).

albellana. f. / cacahuete. (DExAVC compartido con Mérida y Trujillo). MJPH de Méjico y Mérida como alvellana.

albellanáh. adj. / bellotas casi secas. (DExAVC compartido con Mérida como abellanadas.

albellana serrana. f. / avellana. (DExAVC compartido con Mérida). Compartido con el VPA como que las avellanas se denominan "avellanas americanas".

albertí. tr. / advertir.

albertise. prnl. / advertise. Posible localismo.

albitrio. m. / arbitrio.

al boleo. loc. / coger de prisa y sin reparar. Compartido con el VPA como a mocho, a ojo.

Comentario: ¡Ya hah arrepiñao el’abío pa’l burro! Quia. He coghío cuatro ehpiguinah al boleo pa lah gallinah. ¿Cuatro ehpiguinah?, y llebah el serón que rebosa satifasión.

alborotina. f. / algarabía, lío.

al cabo de bendimia. loc. / a despropósito, a destiempo.

al caé la tarde. loc. / atardecer. Compartido con el VPA.

alcagüete. adj. / alcahuete.

alcarabán. / clase de ave silvestre.

alcausí. m. / alcachofa de huerta. RAE alcaucil.

B- alcol. / alcohol, por fusión de vocales. En F. alcó.

aldelfa. f. / adelfa. Posible localismo.

aldusema f. / espliego. (DExAVC compartido con Mérida).

alebantá. tr. / levantar.

alebantase. prnl. / levantarse, movilizarse. Posible localismo.

alebanto. expr. / levanto.

al’ehtrimbote. loc. / de un lado a otro. 2. tenerlo todo revuelto, sin orden.

alentoso, sa. adj. 2. pesebre. m y f. adj. / comilón. (DExAVC compartido con Hurdes). RAE, alentoso, como animoso y resistente.

alfarnate. m. / abandonado, sucio. (DExAVC y RAE bribón, tuno). De uso en República Dominicana.

alferesía. f. / enfermedad de ahogo. (DExAVC). RAE, alferecía.

algamula. f. / argamula. (DExAVC compartido con Valle de la Serena, Herrera del Duque, Cheles, Monesterio, Campanario y Táliga).

alguna. det. 2. na y menoh. loc. / poca cosa. La 1ª acepción compartida con VPA "este año parece que los olivos van a echar algunillas aceitunas". La 2ª acepción posible localismo.

Comentario: ¿Sabéih que el Martillón se l’ha pegao contra un’olibo? Eso ehtaba cantao; a ése le guhtaba demaseao el’alpihte y ha terminao con’el coche arrebentao y un’olibo arrancao de cuajho. Y el dueño l’olibo ahora, por na y menoh, quie una indenisasión millonaria. Ábe, poh se la tendrán que dá. Tú fíjhate lo que es’olibo podía habé dao d’aquí hahta siempre.

B- alinda. / lindar, por prótesis. En Fuente alindá. RAE, alindar, como antigüismo.

alisase. prnl. / peinarse rápido. Compartido con el VPA "date un alisón en los pelos…" RAE.

allá penícula. loc. / que se las apañen. Compartido con el VPA "allá película, ¡Allá ellos! ¡Qué se las apañen!"

al lebantá el día. loc. / a media mañana. Posible localismo.

alma mía. adj. / de poco ánimo. Compartido con el VPA.

almendrón. m. / peladilla. Posible localismo.

almericana, almericano. adj. / americana, americano. Posible localismo.

almijharra. f. . / enganche de la caballería a la máquina de amasar el pan en las tahonas. 2. palo horizontal del tiro de la noria. (DExAVC compartido con Badajoz). RAE las dos acepciones como almijarra.

almorsá. tr. / desayunar, comer por la mañana. MJPH como almorzar de Tenerife, Santander, Arg. y NIDRA. Admitida por la RAE

almujhe. m. / trozo pequeño de tierra.

a lo primero. loc. / al principio.

alpaca. f. / paca.

alperchín. m. / alpechín. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván).

alpihte. m. / vino y bebidas alcohólicas en general. (DExAVC compartido con Trujillo). Compartido con el VPA. RAE como alpiste.

al pumpún. loc. / pagar al contado. Compartido con el VPA.

al raso. loc. / a la intemperie. Compartido con el VPA. RAE.

al regolgué. loc. / a la vuelta, al revolver. Compartido con el VPA como alregorvé.

al remate. loc. / por fin. Compartido con el VPA como "a remate has terminado la casa".

alreó. adv. / alrededor. 2. círculo. (DExAVC compartido con Mérida como alreor). Compartido con el VPA como "hay que dar bajeras por to el reor de la casa". Me procupan loh alreoreh de mi hijho máh q’un día sin pan.

alreoreh. adj. / círculo de personas a cargo de la propiedad de un señor. 2. colaboradores de un cargo público

alsa, pilili. interj. / mostrar admiración. Compartido con el VPA ¡Alza, pilili! ¡Qué peripuesta vienes hoy!

al se de día. expr. / al amanecer. Compartido con el VPA "al ser de día siempre hay blanduras". Siempre hay blanda, se diría en La Fuente.

altamuseh. m. pl. 2. chochoh. m. pl. / altramuces. (DExAVC 1ª acepción compartida con Mérida).

B- altereá. / alterar, por apéntesis. Se comparte con el VPA. (DExAVC, altereá, como alterar y desnudarse.

altoh. m. / piso superior de una casa. MJPH de Andalucía, Perú, P. Rico, Arg, Chile, Par y Urg como altos.

aluego. adv. / luego. Compartido con el VPA.

alulá. tr. / ulular.

alunao. adj. / jamón en malas condiciones, con un círculo blanquinoso tras el corte. RAE, alunarse, como alimentos en mal estado y herida inflamada.

amagá. tr. / inclinar. Compartido con el VPA: "para entrar, tienes que amagar la cabeza…" RAE, amagar, también lo recoge como ocultar y esconder.

a malah penah. loc. / casi nada. Posible localismo.

Comentario: Yo, hoy no salgo al campo. Poh yo b’iá probá a bé qué pasa. ¿Qué ba a pasa?, poh que te bah a mojhá, ¿no ehtáh biendo que el tiempo no tie considerasión y a malah penah dehcampa?.

a mal traé. loc. / manipulado por alguien.

amargoso, sa. adj. / amargo. RAE.

Comentario: diría la persona común: qué almendrah máh amargosah me dihteh el’otro día. Ábe, pa que echeh loh quirioh jhoío roñoso; que no comeh na si no te lo dan.

amarrá. tr. / atar. MJPH de Tenerife, Perú, Argentina y Méjico como amarrar. Admitida por la RAE. Parece más bien un término marinero y según nuestra paisana, María José Porro Herrera, está muy relacionado con Fuente.

amasijho. m. / acción y efecto de amasar. RAE como amasijo.

ambolia. f. / embolia. Posible localismo.

ambrochá. tr. / abrochar.

amedrantá. tr. / amedrentar. RAE ambos vocablos.

a mí tururú. loc. / a mí qué me importa. Compartido con el VPA.

amo de la capacha. loc. / el que domina, el que manda.

amoh. adv. / vamos. Saludo e interj. Posible localismo.

amoh allá. loc. 2. ei. iterj. / saludo.

amolase. prnl. / aguantarse, fastidiarse. MJPH de Andalucía, Arg, Méjico y NIDRA como amolarse. Admitida por la RAE.

amonao, ná. adj. 2. chihpo, pa. adj. / borracho. (DExAVC amonao, compartido con Hurdes). RAE como amonado.

amonehtijhoh. m. / amonestaciones. (DExAVC compartido con Hurdes).

amonimato. m. / anonimato. Posible localismo.

amoragao, gá. adj. / entristecido, apesadumbrado. (DExAVC compartido con Trujillo, Don Benito, Guareña y Mérida como amoragar: hacer las cosas atropelladamente y mal.

amorrá. tr. / aceptar. 2. enfermar, estar triste. Compartido con el VPA y RAE como amorrar.

amorrajhúo, úa. adj. / enfadado. (DExAVC como amorrahudo).

amoto. m. / moto. Compartido con el VPA.

B- analises. / análisis, por cambio acentual. En F. análiseh. Compartido con el VPA como analís.

B- anastesia. / anestesia, por alteración. En Fuente anahtesia.

an cá. loc. / en casa de. Compartido con el VPA como contracción anca.

Comentario: ¿Ónde iráh tú tan lighero? An cá Calamonte, que m’han dicho que hoy tiee tapah de guarrino. ¡Chacho!, no te beh jharto ni en nabidá. Ábe; yo soy asina, ya lo pueh bé, máh que relleno, gordino. Y asín me ando y a bé q’hago.

andá. intr. / existir, haber. Compartido con el VPA "Por aquí anda ahora la gripe".

and’allá. interj. / ¿no me digas? Posible localismo y degeneración de anda ya.

andá alreó. loc. / hacer la pelota.

andá loh pasoh. loc. / gestionar algo. Compartido con el VPA como hacer las pesquisas.

andamoh. adv. / anduvimos.

anda que eh chico. expr. / alrevés te lo digo. Interjección aumentativa.

andara. adv. / anduviera.

andaron. adv. / anduvieron.

B- andé. / anduve, por analogía de la primera conjunción.

Comentario: el’otro día me s’aberió el cacho amoto y anda que no andé na arremolcándolo. Llegué a casa rebentaíto. ¡Ino!, que no podía con mi ehtampa. Y aluego resulta que se quedó sin gasolina. Una puta putá, tú.

andé. m. / circunferencia de la noria. (DExAVC compartido con Badajoz como andel). RAE como andén.

B- ande. / donde, por aféresis. En F. ande, onde u aonde. Tanto como antecedente como interrogante. MJPH de León y Bierzo, Santander, Murcia, Puerto Rico y Bable como onde.

andileh. m. / lugares. 2. pasos.

andó. adv. / anduvo. Posible localismo.

andrina. f. / ciruela pequeña y amarilla. (DExAVC compartido con Villanueva del Fresno). RAE recoge endrino como árbol.

anque. adv. / aunque. MJPH de Andalucía, Murcia, Puerto Rico, Argentina, Colombia, Méjico, Perú, Uruguay, R. Dominicana, Mérida y Extremadura como manque.

ansia. f. / ambición, anhelo. RAE.

ansiah. f. / náuseas. (DExAVC compartido con el norte de Cáceres). Compartido con el VPA como ansias. MJPH de Tenerife, Puerto Rico, Méjico y Venezuela. Admitida por la RAE.

B- anteyer. / anteayer, por monoptongación. En F. antié. Se usa en cuba como antier. RAE como antier.

B- antiguario. / anticuario, por sonorización.

antojherah. f. / anteojeras. Trozo de la jáquima de las bestias equinas de tiro para evitar que vean hacia los lados. RAE como antojera.

Comentario: ¡Chacho!, l’hah puehto lah antojherah al burro tan’apegáh a lah córneah que no be ni p’alante. Déjhalo, el burro no nesesita bé; lo suyo eh tirá p’alante y nunca trompesará máh d’un golpe en’el mihmo peñahco.

añedío. m. / añadido. 2. adicionar. (DExAVC como adeñío y adeñir). RAE como añedir dialectismo.

añiúra. f. / añadidura. Posible localismo.

Comentario: Tengo una chaqueta con tantah añiúrah que ya no le quea ni un troso de cuando el sahtre me la hiso. Buah, poh tú tieneh suerte. ¡Ino!, ¿y yo suerte ensima por qué? Porque la mía, como no la pue pagá, se la queó el sahtre y ehtá prefiriendo abrigale el tallé y no mi cuerpo serrano.

año la riá. loc. / año catapún. Compartido con el VPA.

añugase. prnl. / atragantarse. (DExAVC compartido con Cañaveral como añurgar; en Mérida como añogar). MJPH de León, Santander, Mérida y NIDRA como añugarse. Admitida por la RAE como añusgarse.

B- apalpá. / palpar, por prótesis y ensordecimiento. RAE como apalpar.

apañá. tr. / sustraer. MJPH de Méjico y Aragón como apañar. RAE.

apañao, ñá. adj. / atento, educado, mañoso. Compartido con el VPA "Mas apañao que un carrillo lata". MJPH de Andalucía, León y NIDRA como apañado. RAE.

Comentario: Tengo el moso de mulah máh apañao en sincuenta kilométroh a la reónda. Ése ni pa comé se sienta. ¡Ino!, ¿poh cómo lo hase? S’acuehta.

apaño. m. / arreglo, amancebamiento. Compartido con el VPA "como se lleva bien con su mujer se ha buscado por ahí un apaño". RAE como amancebamiento.

aparato. m. / abión. Compartido con el VPA.

aparente. m y f. adj. / cumplidor, atento. Compartido con el VPA "Para estas cosas es la mar de aparente". Admitida por la RAE.

aparesamoh. adv. / aparezcamos. Posible localismo.

aparesé. tr. / encontrar. Admitido por RAE como aparecer.

Comentario: ¡Tú!, me s’ha perdío la cartera. ¡Chacho! ¿Y tenía dinero? El jhorná del día. Poh ya la hah bihto bahtante, tú. No sé; mi madre l’ha resao a un santo mu milagroso y dise que tie q’aparesé, tú; y, si no, no le pue poné la bela que l’ha prometío. No hagah mucho caso d’éso poh loh santoh se conforman con la bela agradesía de la primera que llega. Son’asina tamién loh santoh, tú.

apartaéro o apartijho. m. / apartado. RAE apartadijo.

a pata gato. loc. / a menudo. Posible localismo.

apencá. tr. / trabajar. RAE apencar como sufrir.

B- apercibir. / percibir, por confusión parcial de significado. En F. apersibí. RAE, apercibir, como en desuso.

apergollá. tr. / apretar por el cuello. MJPH de Méjico y Mérida como apergollar. RAE de Cuba y Méjico.

aperrangase. prnl. / sentarse a pierna suelta. (DExAVC compartido con Zarza de Granadilla como aperrangalse).

aplahtase. prnl. / estar sentado, no hacer nada. Compartido con el VPA "en cuanto llega de la calle se aplasta y ahí se tira todo el santo día". MJPH de Andalucía, Guatemala, Méjico y Nicaragua como aplastarse.

apocao, cá. adj. / mimado, de poco ánimo. (DExAVC compartido con Moraleja como apopao). RAE, como apocado, tambien lo recoge como vil o de mala condición.

Comentario: Nicasio, el Duerme Braseroh, nasió mu enquencle y su madre lo apocó tanto que le coghió cagaso al mundo. Nasió mu alfeñique y en cuanto la orilla l’echaba ensima una tormenta, un’airaso o una pelona mañanera, jharreba pa casa acobardaíno perdío el jhoío.

a poco. loc. / con poco.

apoderase. prnl. / expansionarse. 2. predominar. MJPH, como acaparar, monopolizar en Cuba y Argentina He de señalar que, en mi labor de campo, he indagado sobre estos términos y todos los consultados me remitían a apoderase. RAE.

apoltronase. prnl. / estar sentado e inactivo estando sano. MJPH del NIDRA como apoltronarse. RAE.

aporreá. tr. / pegar.

aportá. tr. / ir a un sitio. RAE como aportar: acudir.

Comentario: Ehte hijho mío dende hase una eterniá ni aporta ni aparese por casa. Tu nuera tiene mucha culpa de to ehto. La nuera no; una querendona jhoía eh la que me lo trae a mal traé. Ahora como s’entere la mujhé que s’aprebenga, poh ésa lo capa retorsiéndole loh compañoneh. Como te lo ehtoy disiendo; asinitamente.

apoyo. m. fig. / reteso en el ordeño. Admitida por la RAE como sacar la apoyadura de los pechos de las hembras.

aprebení. tr. / prevenir. Compartido con el VPA. RAE compartido con Andalucía, Colombia y Guatemala como aprevenir. Extremadura para los señores académicos, una vez más, no existe.

aprepará. tr. / preparar. Posible localismo.

apreta. adv. / aprieta.

apruebo. m. / bueno, de garantía. Compartido con el VPA "Estos melones son de apruebo".

apuntase. prnl. / afiliarse.

Comentario: Benga, hijha que te bi’apuntá a la ehcuela. Y ten cudiao no te quiten ni la pisarra ni el pisarrín. Y, sobre to, mucho ojho con la libreta y el borradó. Mame pero si no llebo na de eso que tú diseh. Bueno poh se lo quitah a alguien que ya me he ghahtao bahtanteh perrah en ti ehcamondándote d’arriba a bajho y labándote el babero.

a punto de caramelo. loc. / en el momento más adecuado. Compartido con el VPA como "cuando la cosa estaba a punto de caramelo, se presentó el padre".

apuro. m. / nervio. 2. grima. 3. aprieto. 4. conflicto. 5. urgencia. 6. vergüenza y aturrullamiento. Todas las acepciones compartidas con la RAE.

a rahpaterrón. loc. / segar a ras de suelo. Compartido con el VPA como "el árbol no ha brotado porque lo cortaron a rapaterrón".

a rahtro. loc. 2. rahtreando. adv. / a rastras.

a ran. loc. / a ras. Posible localismo.

arangután. m. / orangután. Posible localismo.

arañón. m. / arañazo. MJPH de Argentina, Colombia y Puerto Rico.

arbilla. f. / guisante tanto silvestre como de cultivo. (DExAVC compartido con Barcarrota como albilla).

arbolaga. f. / aulaga. (DExAVC compartido con Badajoz y Coria como abularga; y en Arroyo de San Serván y Villanueva del Fresno como albolaga). RAE ardeviejas.

arbolario, ria. adj. / antojadizo, tornadizo, novelero. (DExAVC compartido con Hurdes). RAE como botarate.

árdiga. adj. / desenvuelta y hacendosa. (DExAVC compartido con Hurdes).

ardoreh. m. / acidez en el estómago. RAE como ardores.

arehtinoso, sa. adj. / deslustrado. Se aplica, despectivamente, a los gatos también a las personas. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván). RAE, arestín, lo recoge como efermedad animal en los cascos, en la piel y, como sarna, de Andalucía, Argentina y Chile.

Comentario: La mujhé caminaba po’l mundo dándole la ehpalda. Suh jharamandeleh eran el reflejho de suh carensiah. Poh el arehtín le sobraba de tal manera que el mote ni boh lo cuento.

B- arengue. / arenque, por sonorización. Compartido con el VPA como arenca.

armaleh a loh críoh. loc. / juguetearles a los niños, animarles a balbucir y a hablar.

armá loh crioh. loc. / pimeros balbuceos con la boca y los brazos.

arminihtrá. tr. / administrar.

arminihtraó, ra. adj. / administrador.

armirá. tr. / admirar.

armirable. adj. / admirable.

armisible. adj. / admisible.

armití. tr. / admitir. Igual para todos los tiempos.

a roá que lo mandeh, a roa se echa. expr. / persona buena, dócil y voluntariosa. Posible localismo.

arquirío. adv. / adquirido.

arradio. m. / radio. Compartido con el VPA.

arrahcá. tr. / rascar.

arramplá. intr. / arramblar. MJPH como arramplar: arrebatar, llevarse todo, de León y Tenerife. RAE.

Comentario: El Pata Negra, cuando sale al campo tiemblan hahta lah jhormigah; con to lo que l’alcansa a la bihta arrampla y lo hase suyo. Coño, no te digo máh: hahta loh peñahcoh del camino ban’al serón. ¿Pa qué loh quedrá?

arreate. m. / arriate. Posible localismo.

arrebaná. tr. / cortar pan. 2. rajar y matar. (DExAVC).

arrebañá. tr. / rebañar. RAE como arrebañar.

arrebolcao. m. / revolcado.

arrecoghé. tr. / recoger. (DExAVC compartido con Mérida y Hurdes). MJPH de Méjico como arrecoger.

arrecolgase. prnl. / recolgarse. Compartido con el VPA.

arrechucho. m. / amago de enfermedad. Compartido con el VPA. RAE.

arreglase. prnl. / ennoviarse. Posible localismo.

arregohtase. prnl. / acostumbrarse. RAE como arregostarse y regosto, deseo de repetir una sensación agradable.

Comentario: Don Sipriano fido echao del seminario porque s’arregohtó a una sierta debililidá onde lah cohtillah pierden su dino nombre. Y, no sabiendo mu bien q’hasé de su esihtensia, un poso, un día, lo llamó a su fondo. Y allí quedaron suh dehdichah y temoreh: entre el líquido elemento que to lo purifica o lo ehcorrompe.

arrehtao, tá. adj. / detenido

Comentario: Arrehtaron al Garbanso Duro y, anque imploró perdón a loh uniformeh como lah lechugah, acabó en’el calaboso del pueblo. Y fido, como aquel que dise, por cambiá de sitio unoh garbansoh como chinoteh que le sirbieron de remoquete pa to la bida.

arrehtoh. m. / facultad. RAE como arrestado: audaz, arrojado.

arrejhuntá. adj. 2. arrebujhá. adj. / pareja de hecho. La 1ª acepción compartida con el VPA como amancebarse. (DExAVC la 2ª acepción compartida con Arroyo de San Serván y Azuaga rebuhar como amancebarse). RAE como arrejuntar.

arrejhuñá. tr. / arañar. 2. robar. (DExAVC compartido con Hurdes y Cañaveral; y en Portaje y Villamiel, auñal es robar).

arrematá. tr. / rematar. RAE.

arremeté. tr. / remeter. RAE como arremeter.

arremetía. f. 2. arrempujhón. m. / empujón. (DExAVC compartido con Guadalupe y Mérida como remetía: regate, movimiento brusco para esquivar un golpe).

arremolcá. tr. / remolcar.

arrempujhá. tr. / empujar. RAE como arrempujar y arrempujón como en desuso. MJPH de Colombia, Puerto Rico, Argentina y Méjico.

arrengá. tr. / cojear. (DExAVC).

Comentario: Ehtaba rengo el’hombre pero siempre le llamaron el’Ehtriba. Era de pocah letrah el’hombre. Y cuando tubo el percanse que le dejhó arrengao, siendo mosete, dijho que al meté el pie en’un bujhero le ehtribó la pierna y se la ehtalló; y, al se de palabrah parcah y hablá fontanéh, se riyeron d’él y le quedó al’hombre pa siempre el’Ehtriba.

arrengao, gá. adj. / encorvado. (DExAVC compartido con Trujillo).

arrepiñá. tr. / robar o coger con avidez una cosa. (DExAVC compartido con Zarza de Granadilla como arrepañal. En Mérida y Guareña como repañar). RAE como rapiñar.

arrepío. m. / arrebato. (DExAVC compartido con Zarza de Granadilla. En Mérida como repío).

arresío, sía. adj. / helado, entumido. (DExAVC compartido con Badajoz y Cáceres). RAE como arrecir.

B- arribote. / arriba, por sufijación. Queriendo señalar, en La Fuente, arriba y lejos.

arrihcao, cá. adj. / garboso, pulcro y dispuesto. (DExAVC compartido con Trujillo). MJPH de León, Bierzo y Perú como arriscado. RAE, arriscado, como gallardo, bizarro y desenvuelto.

arrimá. tr. acercar, juntar. / MJPH del NIDRA. RAE como arrimar.

arrimaéro. m. 2. jhato. m. / hato. (DExAVC compartido con Mérida).

arrimase. prnl. / cortejar. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván).

arrimase al sol que máh calienta. expr. / aprovecharse, chaquetear.

Comentario: Semoh tontah lah mujhereh. Semoh unah pánfilah hahta con lah pesaíllah. Sí, semoh tan tontainah que hahta en sueñoh ehperamoh a que benga. Semoh tontah pero, dend’ahora, si no me s’arriman daré yo el salto. ¡Chacha! Será el paso. El paso y endihpuéh lo q’haga falta; ábe.

arrochá. tr. / arriesgar. (DExAVC en Guijo de Granadilla).

arrodeá. tr. / rodear. RAE como arrodear.

arrodease. prnl. / torcerse algo. Compartido con el VPA.

arrucá. tr. / ganar, arruinar en el juego. RAE arruchar.

arruche adj. / sin dinero por el juego. 2. gastar todo. (DExAVC la 1ª acepción compartida con Alcuéscar y Montáchez y Alburquerque como ruche). Compartido con el VPA como a perruche. "No hizo más que empezar la partida y ya estaba a perruche". RAE.

arrumbao. adj. / edificio en ruina. (DExAVC compartido con Madroñera como tirar, caer, arrumbá). RAE, arrumbar, como apartar.

arrutaíno y arrutao, tá. adj. / acurrucado, encogido. (DExAVC compartido con Mérida y Trujillo).

Comentario: No sabía quién le echaba anteh de su cuarto habitasión si la rutinaria cohtumbre o su enlutá madre. Pero al Medio Bembrillo, dende chiquenino chico, arrutaíno en’ibierno o algo ehtirao en’el fogoso ehtio, lo llamaba una piara de la que sólo se l’apegaba la pehte guarruna.

artihta. m y f. adj. / actriz, actor.

artillero, ra. adj. / insolente. Posible localismo.

a salto de mata. loc. / de aquí para allá. Compartido con el VPA.

a sangre fría. loc. / sin precipitación, premeditado.

asaón. m. / azada larga. Posible localismo.

asarón. m. / zacho. Posible localismo.

a secah. loc. / sin más. Compartido con el VPA como "me llamo Pedro a secas".

aseitineh. m. / clavos de los zapatos. Posible localismo.

asendensia. f. / ascendencia. Dado el seseo de La Fuente, en este caso, la c desaparece. En lo sucesivo no repetiremos ningún otro vocablo con sc.

asentó mal. loc. / sentó mal.

asibarrao, rrá. adj. / calenturiento. (DExAVC).

asidente. m. / accidente. En Fuente se sesea también la doble c; trataremos de no repetirlo.

B- asín. / así , por paragoge.

asina. adv. / así. MJPH de León, Tenerife y Aragón. RAE como vulg.

asindoque. m. / síncope. (DExAVC).

asinita. adv. 2. asinitamente. adv. / de esa manera. Posible localismo.

asoferfia. f. / azufeifa. (DExAVC).

asolanao, ná. adj. / mal de cabeza por el sol. (DExAVC compartido con Arroyo de San Serván). Compartido con el VPA como atontao, nervioso por el fuerte viento solano que suele soplar durante semanas enteras. RAE como asolanar.

asornagao, gá. adj. / andar escocido. Posible localismo.

Comentario: Le cayó algo raro onde el bandullo pierde su desente calificativo y andó toa su bida máh ehcanrranchao q’una rumiante lechera. Y le pusieron el’Asornagao porque lo suyo era andá ocupando toa la calle, lah aserah y loh lumbraleh da lah casah. Sin contá que, con suh refregoneh, dehlusía lah bajhearah de lah facháh.

asotea. f. fig. / cabeza. Compartido con el VPA. RAE como azotea.

B- astrosis. / artrosis, por alteración. En F. ahtrosi.

asujhetá. tr. / sujetar.

asulete. m. / azulillo. Compartido con el VPA como azulejo, producto que en una bolsita se usaba para azulear la ropa.

asura. f. / picor, comezón. (DExAVC compartido con Hurdes).

atacase. prnl. / remeterse la camisa. Compartido con el VPA como atacarse los pañales. RAE como atacar. abrochar, ceñir al cuerpo una prenda.

atalantao. m. / tranquilizado. (DExAVC compartido con Cáceres). RAE, atalantar, con varias ecepciones, lo recoge como extremeñismo.

atehtao de ghente. loc. / atiborrado. Compartido con el VPA como atestarse, empecinarse, apalancarse. RAE, como atestado, la recoge con nuestro significado.

a tensiah. loc. / a expensas. (DExAVC compartido con Alburquerque como amistad, confianza, concordia).

a tentemonete. loc. / a tope, lleno a rebosar. Compartido con el VPA como "la noche que ponen una película verde se pone el local a tentemonete".

aterío, ría. adj. / yerto. REA como aterido.

ateritá. tr. / tiritar de frío. (DExAVC compartido con Mérida).

aterminá. tr. / determinar. (DExAVC compartido con Mérida). Compartido con el VPA "Como éste es un aterminao para los negocios" y aterminar. prnl. decidirse atreverse.

aterrisá. tr. 2. jhosicá. tr. / caer de bruces. Compartido con el VPA "Salió por lo alto del manillar y aterrizó en lo alto de unos cardos"; y " tropezó con el trancón y hocicó en el sanjuan". RAE la 1ª acepción.

atienta. adv. / toca, tienta.

atifá. tr. / oler. 2 mirar, escudriñar. (DExAVC como atilbar y oler).

atiná. tr. / dar en el clavo. 2. encontrar un lugar. RAE como atinar.

Comentario: Subió al autocá, en Sant Andreu (Barcelona)., la rechoncha persona del Meao. Y al llegá a la ehtasión de Triunfo, pidió permiso al chofe pa cambiá el caldo a lah asitunah. Sí, pero no tarde que enseguida salimos, le dijo aquél. Y loh minutoh caminaban y el autocá ni se cohcaba. Y el chofe andaba boca abajho por el techo del’autobúh y el Meao no aparesía. Por fin asomó la mole humana disiendo: uhté perdone la tardansa, pero eh que no atinaba.

atisá. tr. / atinar.

a toh loh máh. expr. / a casi todos. Posible localismo.

atollao, llá. adj. / poco desenvuelto, aturdido. Usado por Vargas Llosa en "Lituma en los Andes" como atollo. RAE.

atomatao, tá. adj. / atontado, confuso. Compartido con el VPA.

a to meté. loc. / a toda marcha. Compartido con el VPA "Se subió a la higuera y empezó a comer higos a to meté".

B- atorgar. / otorgar, por alteración. En F. atorgá.

atracón. m. 2. pechá. f. / hartada. 1ª acepción MJPH de Honduras, Méjico y Andalucía. Admitida por la RAE. 2ª acepción compartida con el VPA.

atranquijho. m. / atención, seriedad. (DExAVC compartido con Mérida como tranquiho de Hurdes y Malpartida de Cáceres como tomar atranquiho. loc).

atrasito. adv. / atrás. Compartido con el VPA como en la cola se colocó desatrito de mí.

atratibo, ba. adj. atractiva.

atrochá. tr. / atajar. (DExAVC compartido con Mérida como trochá). RAE atrochar.

atusá. tr. / mirar algo con dificultad, fijándose mucho. 2. areglarse el pelo ligeramente. Compartido con el VPA. RAE la 2ª acepción.

a última hora. loc. / al fin.

auré. m. / jurel. Posible localismo.

Comentario: Ay cómo tengo loh aureleh hoy, gritaba Puchero Lleno en su puehto de pehcao. Ehtán saltando. Loh han pehcao, hay na, pa llebaloh a la sartén. Y el pehcaéro, por mucho que ehtiraba el gañote, no combensía a naiden. Y eh que ya se sabe: en pleno ibierno, cuando lah matansah han dejhao de ehcurrí, loh fontaneseh prefieren la presa a lah ehpinah.

ausilio. m. / auxilio.

autosia. f. / autopsia. También aquí se produce la desaparición de p intercalada; procuraremos no repetirlo.

B- avarear. / varear, por prótesis. En F. abareá.

 

 

 
Vocabulario de Fuente del Maestre (Badajoz)
 

Carta a manera de prólogo

 

Apreciado, permítame que le llame así, amigo profesor Antonio Viudas Camarasa:

Ante todo un afectuoso saludo y un abrazo de José García Suárez autor del presente trabajo. Créame que me siento gratamente emocionado porque se haya interesado por mi trabajo hasta el extremo de proponerme incluirlo en Internet.

No sé ni cómo empezar estas notas que quiero enviarle tras haberme portado pesadamente por teléfono. Solamente le diré que sin su diccionario, todo y que ya había escrito mi recopilación de relatos "Cuentos Extremeños", no habría sabido sacarlos del estrecho marco fontanés. Gracias a su trabajo tienen un abanico de expresiones más allá de la comarca de los Barros.

Usted habla en la introducción de su libro sobre que desechó aquellos términos admitidos por la RAE y yo también he hecho algo parecido con la particularidad de incluir aquellos términos que recientemente, según "La Enciclopedia" de Salvat Editores S.A. 2003, han sido admitidos por la RAE matizando si coinciden gramaticalmente o no con los recogidos por mí en Fuente. Y también he recogido algunos, fuertemente arraigados en el pueblo, igual admitidos de siempre, que los cursis lugareños, y los maestros de escuela que yo hube de sufrir, los desechaban por considerarlos no adecuados para las miras uniformadoras de aquella España de entonces.

Por todo eso admítame, todo y que pretendo ser humilde ante personas con muchos años de profesionalidad en las letras como usted, el que yo, coincidiendo con su punto de vista, haya buscado darle a mi vocabulario un alcance más allá de nuestra región. Porque en Fuente, producto, creo yo de aquella antieducación, especialmente muchas mujeres, algunos hombres también, huyen de nuestras expresiones populares por considerarlas propias de personas incultas. Y es que las monjitas, tanto del lugar como forasteras y todos los maestros públicos, con los que hasta los ocho años me relacioné, nos decían, si por ejemplo usábamos la palabra chobo en vez de zurdo, que hablábamos como los asnos. Y todo eso durante muchos años fue calando entre los escolares hasta sentirnos avergonzados de nuestra peculiar manera de hablar.

Y al mismo tiempo estaba ocurriendo un fenómeno con el que no debían de contar los que inducían a los enseñantes, lo de enseñantes en aquellos años de posguerra es un patético decir, a que incidieran, hasta en nuestra habla coloquial, en pro de la estandarización de la lengua imperial. Y ese fenómeno era el analfabetismo en el que quedó más de la mitad de la población de Fuente del Maestre. Hecho, creo yo, que ha determinado el que aún se usen tantísimos términos y expresiones, estas últimas, auténticas y riquísimas metáforas. Por lo tanto yo he dirigido mi trabajo a demostrar que el habla fontanesa, dentro de su peculiaridad, en parte, es bastante compartida en Extremadura y quizás más en Andalucía todo y que no somos un pueblo fronterizo sino, como usted sabe, del centro de la provincia de Badajoz. Usted en su introducción hace un merecido elogio a una persona de Arroyo de San Serván, pueblo relativamente cercano a nosotros, por su aportación pues, bien, es con el pueblo de Extremadura que más coincide nuestro vocabulario. Y no sé porque motivo en orden de importancia le sigue Las Hurdes. Luego, cuando haya repasado este trabajo, comprobará que hay más coincidencias con Andalucía, no tanto por lo que aparece en este vocabulario sino por lo que del suyo no coincide con nosotros.

Por lo tanto, ardua tarea queda por desarrollar en este terreno, profesor Antonio. Yo no me siento con ánimos de ir de pueblo en pueblo haciendo labor de campo. Yo sólo pretendo, a través del duende fontanés (una vez que me instale en Fuente queda usted invitado a pasar en mi casa el tiempo que le apetezca y verá lo que es este pueblo, ni Lepe le echa la pata), desarrollar una literatura o escritura delicada, divertida y de expresión variopinta.

Me hubiera alegrado que hubiera visto cómo los escolares mayores del instituto de Fuente, más de cien, disfrutaron este invierno al hacer la presentación del vocabulario. Los profesores no habían visto nunca un fenómeno, en cuanto a atención y, al mismo tiempo de ambiente divertido como el que allí se produjo. Tras una hora de exposición de los vocablos, las expresiones y los comentarios que les fui leyendo, espontáneamente pidieron, a voz en grito, que la charla se pospusiese una hora más. Y la exposición se hubo de posponer porque la directora apercibió que, si no, aquel entusiasmo podía degenerar en alguna altercación.

Bueno, profesor Antonio, encantado de que se haya interesado por mí. Mi trabajo, menos los comentarios, lo tiene a su entera disposición por si algún día decide ampliar su "Diccionario Extremeño". Le adjunto también una parodia que dos escolares de secundaria están emitiendo en la emisora local de Fuente. Se trata, como podrá comprobar, de un simulacro entre una chiquilla y una locutora de radio de Barcelona. Según el profesor Arturo Castro Alonso, una bellísima persona, natural de Plasencia, está teniendo una aceptación formidable y el hombre no para de animarme a que le envíe más y más guiones. Podrá comprobar que hay una cierta diferencia entre la grafía de "Leoncina" y la del vocabulario. Pero es que no he querido forzar más a las escolares y total, como está destinado a la radio, tampoco tiene tanta importancia. ¿Cabría alguna posibilidad de ofrecerlo a alguna emisora de Cáceres?

En cuanto a hacerme socio: eso está hecho. Dígame qué posibilidad habría de participar en alguna revista y si sería posible hacer una presentación de mi vocabulario en la Universidad de Cáceres.

Como puede ver, uso como tercer apellido Saavedra. No crea que es ningún megalómano sentimiento. Es en honor del segundo apellido, hoy desaparecido del pueblo, de mi abuela materna, la única que sabía escribir en su extensa familia, y que a mí me indujo a ir a la escuela hasta los ocho años.

José García Suárez Saavedra

 

 

WWW.APLEXEXTREMADURA.COM

OFRECE UN AVANCE DE EDICIÓN

PARA USO EXCLUSIVAMENTE PRIVADO DEL LECTOR

Más información

 
 
 

© Asociación Estudio y Divulgación del Patrimonio Lingüístico Extremeño (APLEx), 2005

APARTADO DE CORREOS 930 - 10080 CÁCERES (ESPAÑA)

Prohibida la reproducción, edición, mutilación, alteración parcial o total -por cualquier medio o procedimiento- de los textos, imágenes y archivos  incluidos en este sitio web. Sí está permitido su uso en los ámbitos de la educación y la investigación. Toda forma de utilización no autorizada será perseguida con arreglo a lo dispuesto en el Real Decreto Legislativo 1/1996, de 12 de abril, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley de Propiedad Intelectual
Última actualización: 26/02/2007

Webstats4U - Free web site statistics

index